Responsabilidad del fabricante por productos defectuosos

Abogados Expertos en Ayudar a Víctimas De Aparatos Defectuosos a Nivel Nacional

Cuando usted paga por un producto, se asume que su uso será seguro. Desafortunadamente, en muchas ocasiones el producto resulta defectuoso y por lo tanto causa heridas y lesiones o incluso la muerte a quien lo usó o a un tercero.

Los fabricantes de dichos productos obtienen ganancias de éstos, y por eso deben ser responsables por cualquier herida o lesión causada por sus productos defectuosos.

Los abogados de Moll Law Group, expertos en daños y lesiones a personas representan vigorosamente a víctimas lastimadas por productos defectuosos, incluyendo los siguientes:

Responsabilizando Al Fabricante Por Los Daños Que Sus Productos Defectuosos Han Causado

Los casos de responsabilidad de daños causados por productos defectuosos se pueden basar en teorías de responsabilidad estricta, de negligencia, de incumplimiento de garantía, o de tergiversación (representación falsa). En algunos casos, los demandantes pueden alegar todas estas teorías y posteriormente investigarlas y ver cuáles son las más apropiadas para llevar a juicio.

Para recibir indemnización bajo la teoría de responsabilidad estricta, por ejemplo, el demandante deberá comprobar, con la ayuda de un abogado experto en la materia, que la condición del producto era irrazonablemente peligrosa, que esta condición peligrosa existió cuando el producto dejó de estar bajo el control del fabricante, y que la condición peligrosa del producto fue la que causó las lesiones del demandante. Hay tres tipos de condiciones peligrosas o defectos que pueden responsabilizar a un demandado: defectos de fabricación, defectos en diseño, y defectos de marketing (también conocidos como falta de advertencia).

Distinguiendo Defectos De Fabricación, De Diseño, y De Marketing

Generalmente, los defectos de fabricación son fallas causadas durante el proceso de fabricación del producto.

Estas fallas existen en un solo o en un set de productos muy limitados en una línea de producción en particular y se desvían de las especificaciones o planos del producto original.

Por ejemplo, en un automóvil la bolsa de aire que no se abre probablemente tiene un defecto de fabricante al igual que lo es un grupo de pastillas contaminadas.

A diferencia de los defectos de fabricación, los defectos de diseño existen en todos los productos de una línea en particular ya qué éstos fueron parte del diseño original. Hay dos tests que se usan para comprobar la existencia de una falla en diseño.

En la prueba de utilidad de riesgo, se responsabiliza a un fabricante cuando la probabilidad de una lesión y su gravedad son mayores a lo que le hubiera costado al fabricante implementar un diseño alternativo más el uso disminuido de éste si se hubiera implementado tal diseño.

La otra prueba es la de la expectativa del consumidor, en dónde el demandante debe demostrar que el producto es más peligroso de lo que un consumidor típicamente espera de un producto como éste en específico.

Los defectos de marketing existen cuando hay fallas en la información del producto que el fabricante provee a los consumidores. Por ejemplo, si un fabricante no le advierte a los doctores que uno de los efectos secundarios de un medicamento en particular es un mayor riesgo de efecto anticoagulante fatal, esto sería una probable falta de advertencia o un defecto de mercadeo.

Aún y cuando el demandante demuestre la existencia de un producto defectuoso, el demandante y el uso que éste le dio al producto deben ser razonablemente previsibles. La responsabilidad solo existe si la persona que pudiese ser lesionada es razonablemente previsible, y si el uso que esta persona le dio al producto también lo es.

Si usted comprueba su caso exitosamente, podrá recibir una serie de compensaciones por daños, incluyendo cuentas médicas, gastos de bolsillo, el costo de tratamiento a futuro, pérdida de ingresos, angustia mental, e indemnización por dolor y sufrimiento.

Explore Sus Opciones Con Un Abogado De Responsabilidad De Daños Causados Por Productos Defectuosos

Nuestros abogados en responsabilidad de daños causados por productos defectuosos aconsejan a personas que se han lesionado en todos los Estados Unidos por haber usado medicamentos viciados, aparatos médicos, partes de autos y otros artículos defectuosos. El despacho de abogados Moll Law Group provee representación agresiva y educación extensa al consumidor.

Estamos acostumbrados a manejar casos grandes que tienen un impacto social significante, a menudo asegurando billones de dólares en los casos con los que nos hemos involucrado. Podemos representar a consumidores lesionados en California, Florida, Nueva York, Texas, Pennsylvania, Ohio, y Michigan. Llámenos al 312.462.

1700 o use nuestro formulario electrónico para una agendar una consulta en español gratuita.

Responsabilidad Civil por Productos Defectuosos | Maggiano, DiGirolamo & Lizzi P.C

La ley de responsabilidad civil por productos defectuosos mantiene a cualquiera o a todas las partes de la cadena de fabricación de un producto en particular responsables por los daños causados ​​por el producto. Dependiendo del tipo de producto defectuoso y el supuesto defecto, las partes responsables pueden incluir al fabricante, distribuidor, proveedor o minorista.

Los casos de responsabilidad civil por productos defectuosos pueden reducirse a simples expectativas: un producto debe cumplir con las expectativas razonables de un consumidor. Si no lo hace y causa daños en el proceso, podría haber motivos para un caso de responsabilidad civil por productos defectuosos.

Esto puede variar desde un asiento para niños que se desabrocha aparentemente sin motivo; a un medicamento que no advierte sobre los peligros de tomarlo durante el embarazo; a una estufa de gas que libera una llama irracionalmente alta cuando se enciende.

Si un producto no se comporta de la manera que debería, no incluye las advertencias o instrucciones adecuadas, o es razonablemente inseguro, la ley de responsabilidad civil por productos defectuosos puede entrar en juego.

Si usted o un ser querido ha sido lesionado por un producto defectuoso, es importante contar con la participación de un abogado experimentado lo antes posible.

You might be interested:  Instalacion de nuevos servicios por la comunidad de propietarios

Maggiano, DiGirolamo y Lizzi han ganado una serie de veredictos y resoluciones multimillonarias, que incluyen una indemnización monetaria de $600,000 para un conductor de camión lesionado por una escalera de camión con un diseño defectuoso.

Póngase en contacto con Maggiano, DiGirolamo y Lizzi al (201) 585-9111 o complete un formulario en línea para programar su consulta gratuita y confidencial.

¿Cuáles son los Principales Tipos de Reclamaciones de Responsabilidad Civil por Productos Defectuosos?

La responsabilidad civil por productos defectuosos es un término genérico para varios tipos diferentes de reclamaciones. Los tres tipos más comunes de defectos en los casos de responsabilidad civil por productos defectuosos son:

Los defectos de diseño son fallas en el diseño original de un producto que hace que sea irrazonablemente peligroso o riesgoso para los usuarios potenciales. Para demostrar un diseño defectuoso, el demandante debe ser capaz de demostrar que el producto fue intrínsecamente defectuoso; en otras palabras, incluso si el producto se usara según las instrucciones, aún sería peligroso.

Las siguientes preguntas ayudan a determinar si existe o no un defecto de diseño:

  1. ¿El diseño del producto era irrazonablemente peligroso antes de la producción?
  2. ¿Era plausible anticipar que el diseño del producto podría dañar a un usuario potencial?
  3. ¿Pudo el fabricante haber utilizado un diseño superior económicamente viable que no alteraría el propósito del producto?

Responder afirmativamente a cualquiera de estas preguntas significa que puede haber motivos para una reclamación de responsabilidad civil por productos defectuosos.

Reclamar un defecto de diseño a veces requiere que el demandante demuestre negligencia en el diseño defectuoso, pero en otros casos, un fabricante puede ser considerado responsable si el demandante puede demostrar que existe una alternativa segura y rentable. (Por ejemplo, General Motors enfrentó litigios en 2014 por fabricar interruptores de encendido defectuosos que causaron más de una docena de muertes y podrían haber sido reparados por menos de $1 por automóvil).

Los defectos de fabricación son una desviación de las especificaciones de un diseñador o fabricante para un producto. En estos casos, el fabricante no produce productos de acuerdo con el plan predeterminado, lo que resulta en un producto final inseguro.

Los defectos de fabricación se encuentran entre los más fáciles de probar porque las normas o especificaciones de diseño interno mostrarán que el producto final se fabricó incorrectamente.

Los defectos de comercialización ocurren cuando un producto está incorrectamente etiquetado. Los defectos de comercialización se conocen comúnmente como el incumplimiento de proporcionar etiquetas o instrucciones de advertencia adecuadas.

Si no se advierte a los consumidores de los riesgos de seguridad ocultos o no se les proporcionan las instrucciones adecuadas a los consumidores para un manejo seguro del producto, la empresa puede verse expuesta a la responsabilidad civil por productos defectuosos.

En casos más preocupantes, una empresa tergiversará intencionalmente un producto para minimizar los riesgos, aumentar las ventas o cumplir otros objetivos internos. Esto también puede calificar como responsabilidad civil por productos defectuosos si la tergiversación conduce a lesiones u otros daños.

¿Qué Debe Demostrar Usted en un Caso de Responsabilidad Civil por Productos Defectuosos?

La responsabilidad civil por productos defectuosos es un área de la ley en la que el demandante tiene una ventaja significativa sobre el demandado.

Normalmente, un fabricante, proveedor o minorista demandado desconoce el defecto del producto hasta que se presenta una reclamación, lo que le brinda a usted y a su abogado suficiente tiempo para recabar pruebas y preparar un reclamo antes de alertar a la parte responsable.

Los demandantes en casos de responsabilidad civil por productos defectuosos también se benefician de ciertos principios legales.

Cuando se trata de defectos de fabricación, los demandantes generalmente no tienen que demostrar que el fabricante fue negligente en el caso, solo que el producto era defectuoso.

Res ipsa loquitor, que significa “lo que habla por sí mismo” en latín, se aplica en ciertos casos y significa que el defecto no existiría a menos que alguien en el proceso de fabricación fuera negligente; por lo tanto, el demandante no está obligado a probar que el demandado fue negligente; es responsabilidad del demandado demostrar que no fue negligente. En otros casos de defectos de fabricación, se puede aplicar una responsabilidad estricta, lo que significa que el demandante solo debe probar que el producto fue defectuoso (no que el fabricante haya sido negligente).

En los casos típicos de responsabilidad civil por productos defectuosos, el demandante debe probar lo siguiente:

  • Él o ella se lesionó o sufrió otros daños
  • El producto en cuestión estaba defectuoso o carecía de las instrucciones adecuadas
  • El defecto, o la falta de advertencias, causó la lesión o daños
  • Cuando se lesionó, él o ella estaba usando el producto de la manera en que estaba razonablemente destinado a ser utilizado

¿Qué Lesiones son Posibles en los Casos de Responsabilidad Civil por Productos Defectuosos?

Con un término general como responsabilidad civil por productos defectuosos, es posible que surja una gran variedad de lesiones. La fabricación defectuosa y el diseño defectuoso pueden contribuir a una serie de lesiones y efectos secundarios mortales, que incluyen:

  • Lesiones Cerebrales
  • Traumatismo de cabeza y cara
  • Lesiones de espalda
  • Parálisis y daño de la médula espinal
  • Lesiones en el cuello y latigazo cervical
  • Quemaduras
  • Lesiones catastróficas
  • Lesiones psicológicas
  • Amputación
  • Huesos fracturados y desfiguración
  • Raspaduras, hematomas y laceraciones
  • Lesiones dentales
  • Trauma de órganos internos
  • Enfermedad
  • Dolor emocional y sufrimiento

¿Cuándo Debe Usted Presentar la Demanda?

Hay una ley de prescripción de dos años en casos de responsabilidad civil por productos defectuosos en Nueva Jersey.

En otras palabras, una vez que descubra (o razonablemente debería haber descubierto) el defecto del producto, usted tiene dos años para presentar una demanda contra el fabricante, vendedor, distribuidor u otra parte culpable.

Si no presenta un reclamo dentro de dos años, perderá su derecho a recibir compensación por sus lesiones.

Los abogados de la empresa y las compañías de seguros a menudo luchan agresivamente contra los casos de responsabilidad civil por productos defectuosos porque un caso exitoso puede abrir la puerta a casos similares y le cuesta al vendedor una gran suma de dinero.

Dicho esto, es importante ponerse en contacto con un abogado con experiencia en responsabilidad civil por productos defectuosos que pueda obtener informes de ingeniería, desarrollar modelos o gráficos del producto, tomar declaraciones detalladas de testigos o representantes del gobierno e investigar a fondo su reclamación.

You might be interested:  Modificar situacion estancia residencia trabajo cuenta propia

Contrate a un Abogado de Responsabilidad Civil por Productos Defectuosos de Nueva Jersey

En un área legal compleja como la responsabilidad civil por productos defectuosos, es crucial contar con un abogado experimentado de su lado.

Maggiano, DiGirolamo y Lizzi tienen más de ocho décadas de experiencia acumulada en derecho procesal, y están preparados para perseguir agresivamente su reclamo.

El fabricante o vendedor de un producto defectuoso debería ser responsable del daño causado por sus productos inseguros, y Maggiano, DiGirolamo y Lizzi trabajarán incansablemente para recuperar sus pérdidas.

Póngase en contacto con Maggiano, DiGirolamo y Lizzi al (201) 585-9111 o complete un formulario de consulta rápida para programar su consulta gratuita y confidencial.

La responsabilidad del fabricante por producto defectuoso y la carga de la prueba | Deloitte España

La obligación del fabricante de resarcir al consumidor final los daños causados por sus productos está regulada en la actualidad en el Texto refundido de la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios, aprobada por Real Decreto Legislativo 1/2007, de 16 de noviembre, (en adelante, “TRLCU”) que viene a complementar el régimen general contenido en los artículos 1902 y ss. y 1101 y ss. del Código Civil sobre responsabilidad extracontractual y contractual, respectivamente.

El principal requisito para tener derecho a una indemnización por productos defectuosos es haber sufrido un daño causado por un bien o servicio defectuoso. En este sentido, el art. 139 TRLCU atribuye la carga de la prueba al perjudicado, que deberá probar el defecto, el daño y la relación de causalidad entre ambos para obtener la reparación de los daños causados.

La reciente sentencia número 495/2018 del Tribunal Supremo, Sala de lo Civil, plantea algunas cuestiones jurídicas interesantes sobre la valoración que debe realizarse de la carga de la prueba del producto defectuoso y en particular, sobre quién recae dicha carga, atribuyendo al fabricante la responsabilidad de acreditar que no se trata de un producto defectuoso.

En el caso concreto se trata de unos codos de cobre instalados en el circuito de calefacción que presentan unas fisuras internas que provocan fugas de agua y daños en la vivienda.

Los daños objeto de reclamación se producen seis años después de que los codos fueran adquiridos al fabricante e instalados, siendo la piedra angular del procedimiento si el tiempo transcurrido es indicio suficiente para que pueda presumirse que el producto no era defectuoso.

La parte actora (consumidor final) interpuso una demanda de reclamación de cantidad en reclamación de los daños sufridos en la vivienda, aportando un informe pericial mediante el que se acreditaban los daños sufridos como consecuencia del mal estado de las dos piezas fabricadas por la demandada.

La parte demandada (fabricante) basó su defensa principalmente en que las piezas utilizadas en la vivienda del actor no eran defectuosas porque de serlo, las fisuras se hubieran manifestado desde el inicio y no transcurridos seis años desde su instalación.  En consecuencia, debía presumirse que el producto no era defectuoso cuando se puso en circulación.

El Juzgador de Instancia consideró acreditado que los daños sufridos en la vivienda del actor fueron consecuencia del mal estado de las dos piezas fabricadas por el fabricante, por lo que el fabricante debía responder de los citados daños.

No obstante, la Audiencia Provincial de Vizcaya consideró acreditado el origen de los daños, es decir que las piezas con sus fisuras eran origen de las filtraciones de agua, pero no que las mismas lo fueran como defecto de fabricación al no haber ningún informe ni aportación técnica de si podían considerarse las piezas defectuosas. De este modo, la citada Audiencia Provincial absolvió al fabricante.

Por su parte, nuestro Alto tribunal considera que la valoración jurídica realizada en la Segunda Instancia acerca de la seguridad que legítimamente cabe esperar de unos codos destinados a insertarse en un circuito de calefacción no es conforme con el régimen de responsabilidad establecido legalmente. Así pues, el Tribunal Supremo entiende que acreditada la fisuración de los codos no es preciso que el perjudicado acredite que esas fisuras existían desde el momento en el que se instalaron los codos.

El Tribunal Supremo destaca que el fabricante se limitó a argumentar que las fisuras podrían deberse a múltiples causas, invocando únicamente como defensa el transcurso de tiempo entre la puesta en circulación del producto y el siniestro.

De este modo, cobra especial importancia el hecho de que el fabricante no hubiera acreditado las razones que permitían considerar probable o normal según las máximas de experiencia comunes algún otro origen probable de la fisura, ni prueba alguna sobre la calidad de sus productos ni ningún otro indicio que permitiera valorar que los codos no eran defectuosos.

Finalmente, el Alto Tribunal concluye que los codos no ofrecían la seguridad que cabía esperar teniendo en cuenta la naturaleza del producto y su destino, en concreto, establece que: “Existe la confianza en que unos codos de cobre destinados a su instalación en un circuito de calefacción van a resistir las altas temperaturas y presiones sin riesgo de fugas durante un lapso de tiempo razonable por lo que, ante la falta de prueba de otra causa probable de la fisuración, no puede admitirse que en seis años ya no quepa esperar que el producto no ofrece seguridad para continuar usándolo conforme a su destino.”

No se piense que el Tribunal Supremo en dicha sentencia entra a realizar una nueva valoración de la prueba, sino que confirma el criterio ya utilizado en la sentencia de 19 de febrero de 2007 (RJ 2007, 2614) en la cual se establecía que correspondía al fabricante acreditar “la idoneidad del producto la concurrencia de otras causas que pudieran exonerarle de responsabilidades, bastando al perjudicado acreditar el daño sufrido y el enlace causal“.

Según dicho criterio no es necesaria la prueba por parte del actor del concreto defecto que haya producido el daño, siendo suficiente acreditar su existencia y el enlace causal, bastando que la parte actora logre convencer al Juzgador de que el producto es inseguro. En definitiva, ello comporta que el fabricante deberá acreditar la idoneidad del producto y la concurrencia de otras causas que puedan exonerarle de responsabilidades.

Si bien dicho criterio parece alejarse del principio de “onus probandi” al atribuir al fabricante la carga probatoria de que el producto no es defectuoso, dicha inversión de la carga de la prueba se encuentra motivada en el criterio de disponibilidad y facilidad probatoria.

De hecho, la propia sentencia comentada ya recoge aquellos argumentos y medios de prueba que el fabricante puede utilizar para demostrar que el producto en cuestión no era defectuoso, entre otros, los relativos a la naturaleza del producto, calidad, su vida útil y su agotamiento.

You might be interested:  Devolucion del resto de cantidades por las clausulas suelo

Responsabilidad productos defectuosos | RAPEX – Your Europe

En esta página

Última comprobación: 24/06/2022

La empresa es responsable de los defectos que pueda haber en sus productos. Si ocasionan daños a los clientes: (muerte, lesiones, daños materiales a los efectos personales por un valor superior a 500 euros, etc.), las consecuencias pueden ser muy graves para el vendedor.

El carácter defectuoso de los productos se determina por la falta de seguridad, que no responde a lo que esperan los consumidores, y no a la falta de idoneidad para su utilización.

La empresa debe tener especial cuidado a la hora de:

  • fabricar un producto final
  • fabricar piezas que se vayan a incorporar a otro producto
  • importar en la UE un producto destinado a la venta.

Si varias empresas son responsables de la seguridad del mismo producto, la parte perjudicada puede actuar contra cualquiera de ellas ante los tribunales.

Las normas en materia de responsabilidad también se aplican a los productos eléctricos y agrícolas. Los contratos de venta no pueden incluir cláusulas que limiten su responsabilidad por un producto defectuoso.

Indemnizaciones

Para pedir una indemnización por daños y perjuicios, la parte perjudicada debe demostrar que:

  • se ha producido un daño
  • el producto era defectuoso
  • el defecto y el daño estaban vinculados.

Exención de responsabilidad

La empresa quedará exenta de toda responsabilidad si puede demostrar que:

  • no introdujo el producto en el mercado
  • no ha fabricado el producto para su venta
  • el defecto causante del daño no existía cuando se introdujo el producto en el mercado
  • el defecto se debe exclusivamente a que el producto tuvo que cumplir determinados requisitos técnicos obligatorios
  • las normas científicas y técnicas más avanzadas no permitirían haber previsto el defecto cuando se introdujo el producto en el mercado
  • solo ha fabricado uno de los componentes del producto y el defecto se debe a su diseño final.

La parte perjudicada tiene tres años para reclamar una indemnización, a partir del día en que haya tenido conocimiento de:

  • los daños
  • el defecto
  • la identidad del productor.

La responsabilidad de la empresa por los daños ocasionados por sus productos cesa tras un periodo de comercialización de diez años, a no ser que haya recibido alguna demanda de indemnización durante ese tiempo.

Búsqueda de productos peligrosos: Safety Gate

Las autoridades nacionales de la UE pueden actuar contra productos que entrañan un riesgo grave para la salud o la seguridad de los consumidores y retirarlos del mercado o prohibir su comercialización.

Los fabricantes pueden también retirar sus productos. Las medidas adoptadas se registran en la base de datos Safety Gate (salvo en el caso de los productos agrícolas, farmacéuticos y sanitarios).

Notificar productos no conformes

Cada país de la UE tiene su propia autoridad nacional encargada de garantizar que los productos introducidos en el mercado sean conformes con la normativa.

Si es usted fabricante, distribuidor o representante autorizado y cree que uno de sus productos en venta no cumple los requisitos de la UE, puede notificarlo a su autoridad nacional a través del portal de alerta sobre seguridad de los productos para las empresas en .

Nota: solo puede utilizar esta herramienta si es fabricante, distribuidor o representante autorizado.

Si tiene preguntas sobre este procedimiento o cualquier otro tema, diríjase a su punto de contacto nacional en en .

Responsabilidad del producto

For more Spanish-language legal materials, please visit our friends at Justia México

La responsabilidad del producto es el arma más efectiva que tiene el consumidor contra los productos peligrosos.

Esta responsabilidad puede ocurrir en cualquier punto en el proceso de fabricación o distribución de un producto.

Consecuentemente, el fabricante, el mayorista y el vendedor del producto pueden compartir la responsabilidad de los daños causados por un producto peligroso o defectuoso.

Defectos que causan lesiones

Una persona lesionada por un producto peligroso tiene la obligación de comprobar que el producto es defectuoso. Existen tres tipos de defectos que le imponen responsabilidad a los fabricantes y distribuidores de un producto:

  • Diseño: Una imperfección o un error en el diseño del producto lo hizo inherentemente peligroso. Esta imperfección existía antes de fabricar el producto.
  • Fabricación: Una falta en el proceso de fabricación causó que algunos productos sean defectuosos.
  • Marketing: Faltaron las advertencias o instrucciones necesarias para usar un producto correctamente.

Los distintos casos de responsabilidad de producto

Responsabilidad estricta: Un demandante puede recuperarse completamente de una lesión sin tener que comprobar mala conducta por parte del demandado. El demandante solo tiene que comprobar que la lesión fue causada por un producto defectuoso que fue fabricado o vendido por el demandado. Este tipo de caso es el más común.

Incumplimiento de garantía: El demandado fue negligente en no advertir al demandante sobre los peligros del producto. Las garantías pueden ser explicitas o tacitas.

Una garantía se rompe cuando un demandante compra un producto con la intención de usarlo seguramente y confía que el fabricante tuvo el conocimiento para crear un producto seguro.

Esta garantía implica que el fabricante o vendedor presento al producto de una manera para que el cliente confié en el producto.

Negligencia: Es más difícil para el demandante comprobar un caso de negligencia. Para hacerlo, el demandante debe de establecer:

  • Una relación entre el fabricante y el demandado en la cual el fabricante tuvo la obligación de proteger al comprador del producto.
  • La falta de cumplimiento de esa obligación.
  • Una relación que causó una lesión o daño al demandante.